El césped artificial con corcho es una opción biodegradable, sostenible y natural.
Aunque todavía es una opción poco usada en el deporte, en el futuro irá ganando protagonismo ya que tiene numerosas ventajas respecto al caucho.
El corcho, al soportar temperaturas extremas, necesita menos riego con lo que ello conlleva un ahorro importante de agua. También facilita el bote del balón y amortigua mas, lo que repercute en un menor número de lesiones para los jugadores.
Es un material que no se pudre y no se filtra a capas inferiores ni contamina el agua. Mantiene siempre un aspecto impecable y no desprende olor.
